Como no, nuestros amigos los insectos también se ven afectados por la elevación de las temperaturas causado por el incremento de los gases de efecto invernadero. El más importante de estos gases es el CO2 , más conocido como dióxido de carbono. Los niveles de este gas en la atmósfera se han incrementado enormemente debido al empleo de combustibles fósiles por parte del hombre. Numerosos estudios aseguran que los niveles de CO2 doblaran los de la etapa preindustrial en los próximos 50 a 100 años.
La mayoría de los cambios producidos en las poblaciones de insectos tendrían su causa en los cambios en la química de las plantas : incremento del carbono, descenso del nitrógeno e incremento de compuestos fenólicos defensivos ( taninos). Además la elevación de las temperaturas podría cambiar la distribución geográfica y las capacidades reproductivas de muchos insectos, incidiendo sobre la abundancia de ciertas plagas y portadores de enfermedades.
¿Cómo afecta el incremento de CO2 a las plantas?
El efecto fundamental es el incremento de la fotosíntesis que resulta en la acumulación de carbohidratos ricos en carbono. Otro de los efectos es la menor pérdida de agua por transpiración a través de los estomas puesto que estos necesitan estar abiertos menos tiempo para absorber la cantidad de CO2 necesario. La acumulación de carbono produce un mayor crecimiento de las plantas, hasta del 50%. Este incremento de biomasa debe repartirse los nutrientes del suelo, especialmente el nitrógeno, con lo cual la concentración del elemento en las plantas baja. En resumidas cuentas las plantas se convierten en menos nutritivas para cualquier herbívoro.
¿Cómo afectan a los insectos los cambios en la química de las plantas?
La afectación depende del tipo de alimentación de los insectos. Aquellos que se alimentan de sabia o de semillas serían en menor medida afectados que aquellos que se alimentan hojas. La falta de nutrientes en las hojas provocaría un aumento del consumo, mientras que la presencia de taninos dificultaría la digestión, disminuyendo el rendimiento energético. Esta falta de nutrientes afectaría particularmente a los estadios iniciales de las larvas , reduciendo sus poblaciones. Además se produciría un enlentecimiento en el desarrollo que haría a los insectos más vulnerables al ataque de predadores y parásitos.
¿Cómo afectarían a la distribución de los insectos los cambios de temperatura?
Los gases de efecto invernadero afectarían a la distribución de insectos de manera directa a través de incrementos en la temperatura y pluviosidad e indirectamente a través de cambios en la distribución de sus plantas nutricias. Por ejemplo, se han registrado en Europa desplazamientos hacia el norte de hasta 250 km en la distribución de determinadas especies de mariposas de diversas familias. Estos desplazamientos hacia el norte coinciden en magnitud con los de las isotermas climáticas, que se han trasladado hacia el norte 120 km al registrase un aumento de las temperaturas medias de 0,8 ºC.
El CO2 y los insectos portadores de enfermedades
Una de las principales preocupaciones acerca del calentamiento global es el desplazamiento de enfermedades asociadas a climas tropicales hacia el polo. La extensión de estas enfermedades está asociada a la extensión de sus portadores e incrementos en las temperaturas implican incrementos en la actividad y distribución de los mismos. Por ejemplo, un incremento de 1ºC en la temperatura media de Ruanda produjo un incremento del 337% en la incidencia de la malaria a medida que los mosquitos ocupaban áreas montañosas que no habían ocupado jamás.
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1 comentario:
es muy interesante! podrias enviarme el link de la informacion. mi correo es dalila.jopia@gmail.com
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