domingo, 13 de abril de 2008

Mis queridos mántidos atacan de nuevo

Pocos animales existen que sean tan fascinantes para mí como los mántidos. Existen como ya comenté alrededor de 2300 especies descritas, la gran mayoría situadas en el cinturón de los trópicos. Estos extraños insectos son parientes altamente evolucionados de las cucarachas. Comparten con ellas todas sus características básicas : cabeza triangular, gran pronoto ( esclerito dorsal del protórax) y elongadas coxas ( muslos) entre otras.

Los mántidos son feroces depredadores que se alimentan en su mayoría de invertebrados aunque excepcionalmente también pueden alimentarse de pequeños vertebrados como ratoncillos, colibries y pequeñas serpientes. Se ha descubierto recientemente que algunas especies complementan su dieta con polen una fuente nutrícia de proteinas.



Espeluznante video donde un mántido devora a un pequeño ratoncillo

La mayoría de los mántidos emplean la táctica de la emboscada para atrapar a sus presas. Permanecen inmóviles en zonas de tránsito de insectos o agazapados entre las flores esperando a que la casualidad quiera que su víctima se ponga a su alcance. El ataque es generalmente muy rápido, atrapan a su presa utilizando las patas delanteras (fémur y tibia dotados de ganchos raptores). Las mantis devoran a su presa completamente exceptuando aquellas partes con mayor contenido en quitina, como las alas.


Fotografía : Ameles spallanziana

El canibalismo ocurrido durante el apareamiento está presente en algunas especies, aunque se ha descubierto que es un hecho que sucede sólo en contadas ocasiones. Se ha demostrado recientemente que los machos se aparean preferentemente con hembras que se han alimentado recientemente.

Sin embargo es muy frecuente que la primera comida de una cría sean sus propios hermanos. Este comportamiento voraz indiscriminado es la razón por la cual los mántidos no se encuentran jamás formando grupos y los intentos para usarlos como agentes de control de plagas fallan inevitablemente.

El apareamiento de las mantis sucede por la noche puesto que constituye una situación de extremado peligro para el insecto que puede ser visto por predadores diurnos ( las mantis son insectos de gran tamaño que vuelan torpemente). Para evitar a los depredadores nocturnos como los murciélagos la mantis cuenta con un órgano auditivo situado en un orificio de las patas posteriores que es capaz de detectar los ultrasonidos empleados por los sistemas de eco localización de estos mamíferos.




Fotografía: Empusa Pennata

1 comentario:

Donelia Pérez dijo...

Me gusta sobre todo la primera toma. El desenfoque que le has dado, el color uniforme y el equilibrio de la escena... Un saludo.