Un contraluz sin complicaciones. Me gusta mucho el efecto de la luz sobre estas flores. Los licénidos las utilizan amenudo como posaderos. Al atardecer resulta más complicado fotografiar las mariposas puesto que con cualquier movimiento extraño vuelan a otra flor sin pensárselo dos veces. Con mucho cuidado me fui acercando, lentamente posicioné el trípode y a continuación coloqué la pinza en el tallo de la flor para que el viento no me fastidiara la toma. Prefiero arriesgar a que la mariposa vuele a hacer una toma trepidada y desenfocada y luego tener que tirarla a la papelera.
2 comentarios:
Preciosa la foto con esta luz y los colores en armonía.
Un saludo
Me gusta muchísimo ese contraluz en la flor y en la mariposa dándole relieve y sacándola del fondo. Y te dio tiempo poner el trípode y unas pinzas al tallo antes de que se fuera la mariposa? A mi me da que te estaba esperando..eh?
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